- 1 kg de chipirones medianos
- 4 patatas medianas
- 1 botella de txakoli
- Aceite de oliva
- Cebollino
- orégano
- Aceite de oliva
- Sal
Limpiar los chipirones. una vez realizado rellenarlos con sus patitas.
Calentar la plancha con un poco de aceite.
Incorporar los chipirones salar un poco y cocinar removiéndolos de vez en cuando.
Finalizar espolvoreando el txakoli sobre los mismos y cocinar unos minutos hasta que los mismo estén blando.
Lavar las patatas y cortarlas por la mitad a lo largo.
Salarlas, hacerles unas incisiones y verter un chorrito de aceite.
Espolvorear con las hierbas y el queso e introducir en un recipiente apto para microondas.
Tapar, cocinar el tiempo indicado.
Servir los chipirones con cebollino recién picado y las patatas alrededor.
J. M. Occhi - 02 · Septiembre - 2022
Los chipirones son animales marinos que viven en el mar Mediterráneo y el Atlántico oriental. Pertenecen a la clase de los cefalópodos y se caracterizan por tener una cabeza separada del cuerpo. Hablamos del calamar común, al que la ciencia bautizó como "Loligo vulgaris". En el País Vasco, donde son desde siempre muy aficionados a este cefalópodo y donde, dicen los vascos, nació la receta que los guisa con su tinta, al calamar pequeño se le llamó, de toda la vida, chipirón. Ahora se escribe con grafía vasca, y ha pasado a ser "txipirón". Siempre se reservó ese nombre para el calamar pequeño; al grande se le llamaba, precisamente, "ojos grandes", en vascuence "begi aundi". Con el tiempo, la palabra "chipirón" se impuso en toda España, siempre para designar al calamar pequeño, hasta que, últimamente, a todo calamar se le llama indistintamente calamar o chipirón. Fuente Lo mejor de la gastronomía .
El Txakoli es un vino joven, afrutado y ligeramente espumoso producido en el País Vasco. A pesar de que ha existido durante siglos (la primera mención del Txakoli es de 1520), ha empezado a hacerse popular en los últimos años, y no solamente en el País Vasco sino también poco a poco en todo el mundo. El txakoli se elabora a partir de uvas de la variedad Courbu, denominadas en España como Hondarribia zuri (blanca) y Hondarribia beltza (tinta; esta última mucho menos extendida). Esta variedad de difícil cultivo tiene la característica de dar un vino ácido, siendo un vino fresco y fácil de beber. El chacolí tradicional es ligeramente carbonatado y con una graduación alcohólica algo inferior a los vinos tradicionales; sin embargo, muchos de los chacolís actuales, en los que se utilizan también otras uvas, carecen de carbónico y contienen una graduación alcohólica similar a otros vinos. La mayor producción se centra en las bodegas de las localidades costeras vascas de Guetaria, Zarauz y Aya, pertenecientes a la Denominación de Origen Getariako Txakolina..