- 1 kg de alcachofas
- Azucar
- Miel
- 2 limones
- Aceite de girasol
- Harina
- Agua para la cocción
- Sal
Limpiar las alcachofas con los tallos, retirar las hojas más duras y cortar las puntas.
Dividirlas en cuatro a lo largo, retirar las barbas y ponerlas en agua con el jugo de un limón para que no se ennegrezcan.
Escurrirlas, secarlas y enharinarlas.
Freírlas en una cazuela con aceite, colocarlas en una fuente con papel absorbente.
En una cazuela honda y ancha poner azúcar y dejar que se disuelva, añadir agua y el zumo de un Limón y miel.
Cocinar despacio y cuando empiece a espesar añadir las alcachofas, removerlas con cuidado para que no se rompan.
Servir calientes solas o como guarnición de otros platos.
J. M. Occhi - 2013 · 2019