• Que preparación tan fácil para preparar este buen aperitivo, que podemos conservar más de un día, con es sabor del queso y sésamo.
  • 150 g de harina
  • 150 g de queso manchego curado rallado
  • 150 g de mantequilla + la de engrasar el molde
  • 1 yema de huevo
  • Semillas de sésamo

Mezclar la harina con el queso en un bol.

Añadir la mantequilla troceada y amasar hasta obtener una consistente.

Agregar la yema y volver a mezclar hasta obtener una masa homogénea.

Hacer una bola, taparla y dejarla en la nevera el tiempo indicado.

Estirar la pasta y con un cortador redondo hacer discos pequeños.

Espolvorearlos con el sésamo.

Colocarlas en una bandeja de horno untada con mantequilla.

Cocerlas el tiempo indicado o hasta que estén doraditas.

Sacarlas y dejar que se enfríen antes de comerlas.