• Aprovechar de los ingredientes que nos da la huerta, el bosque y el corral o granja será una buena idea para preparar un segundo plato con sabor.
  • 400 g de níscalos
  • 1 manojo de ajetes frescos
  • 200 g de pechuga de pollo
  • Aceite de oliva
  • Vino blanco
  • Agua para la cocción
  • Sal

Limpiar y lavar los níscalos para que no tengas tierra y trocearlos.

Quitar la primera hoja a los ajetes, lavarlos y cortarlo en redondeles medianos.

Cortar las pechugas en dados.

Sofreír en un poco de aceite los ajetes, incorporar los níscalos y rehogar unos minutos.

Incorporar la pechuga y sofreírla, bañar con vino y dejar evaporar.

Cubrir con agua y cocinar a fuego lento unos 15 minutos.

Servir caliente.

J. M. Occhi - 15-11-2019 |